viernes, 7 de diciembre de 2018

Vivir aquí la vida eterna


En la vida estamos continuamente haciendo cosas. Desde que nos levantamos hasta que nos acostamos hacemos miles de cosas. Unas por obligación y otras por devoción. Unas por interés propio, otras por altruismo, generosidad y solidaridad. Unas por orgullo, otras por amor. En definitiva, un montón de cosas, que hoy deberíamos plantearnos, y de todas estas, ¿cuáles son las más importantes? Seguramente nos cueste decidirnos por unas u otras. Pero entonces me pregunto, de todas estas ¿cuáles van a permanecer siempre? Muchos pensarán que ninguna, pues todas nuestras acciones son pasajeras. Y no falta razón,  pero hoy se nos invita a poner una mirada más profunda y lejana. Se nos invita a poner la mirada en esas acciones que cambian la vida de unos y otros. Porque la acción pasa, pero es el efecto lo que puede perdurar en el tiempo. Hoy estamos aquí, con una tarea difícil,  “estar en el mundo sin ser del mundo”. Se nos invita a poner nuestra mirada en aquel mundo al que pertenecemos,  se nos invita a que carguemos nuestras mochilas con lo que pertenece a aquel mundo y no a este. Se nos invita a vivir nuestra vida ayudando a buscar a los demás ese mundo al que pertenecemos.  Esto es la evangelización, está es la vida creyente. No podemos imaginar la vida futura igual que la de ahora, porque ya será diferente, porque veremos cara a cara a aquel que nos pensó desde el principio.
Vivamos nuestra vida desde la confianza en una vida plena, la vida que nos espera, la vida eterna.
Maximiliano García Folgueiras

No hay comentarios:

Publicar un comentario